Cecilia Goyeneche y Alberto Welp asumieron en el Consejo de la Magistratura
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Este lunes, Cecilia Goyeneche y Alberto Adrián Welp asumieron como consejeros titulares del Consejo de la Magistratura de Entre Ríos para el período 2018-2020, en representación de la Asociación de Magistrados y Funcionarios del Poder Judicial de la provincia.
En un acto realizado en el Salón Blanco de Casa de Gobierno, y en el cual participaron la ministra de Gobierno, Rosario Romero, y la presidenta de la Asociación de Magistrados, Gabriela López Arango, entre otras autoridades, el secretario de Justicia y presidente del Consejo de la Magistratura, Pablo Biaggini, tomó juramento a los nuevos consejeros titulares de ese cuerpo durante el período 2018-2020.
El nuevo Consejo de la Magistratura quedó integrado, además de Goyeneche y Welp, por Daniel Beltrame, Rodolfo Parente, Mariela Cozzi, Rodrigo Devinar, Guillermo Sal, Mariano Churruarín, Ricardo Sánchez y Patricia Popelka.
En la oportunidad, se destacó que, desde su creación, el Consejo de la Magistratura ya desarrolló y finalizó al 1 de agosto pasado un total de 212 concursos de antecedentes y oposición, mediante los cuales se cubrieron 301 cargos de magistrados y funcionarios de los ministerios públicos, habiéndose registrado un total 978 postulantes inscriptos, muchos de los cuales participaron de más de un concurso.
Al hacer uso de la palabra, la ministra Romero dijo que el Consejo de la Magistratura es “un tesoro que tenemos los entrerrianos que nos permitió subir varios escalones en torno a la calidad institucional, en torno a la designación de quienes acceden al Poder Judicial”.
“Celebramos y atesoramos el Consejo de la Magistratura”, afirmó y añadió que “tenemos una experiencia que es admirada en otras provincias y cuenta con una composición muy plural en la que participan las distintas miradas de la comunidad y de los actores fundamentales que trabajan en el Poder Judicial y sus representaciones.Y ni hablar de la representación de la abogacía que está activamente trabajando en el Consejo de la Magistratura, igual que nuestros académicos provenientes de universidades de la zona, los empleados judiciales y las asociaciones intermedias que hacen un aporte muy interesante, muy bueno, en el sistema de selección de nuestros aspirantes a jueces”.
La funcionaria sostuvo que “si bien quizás haya algunas reformas que hacerle a la ley, la evolución entre el decreto, la constitución de nuestro Consejo y el marco regulatorio que le da la ley, ha sido un proceso virtuoso de los entrerrianos que tenemos que atesorar y sostener”.
“Felicito a quienes dejan el Consejo de la Magistratura por la labor realizada porque queda un mejor Poder Judicial, a la vez que hago votos para que logremos cada vez más mejorar nuestro sistema, profundizándolo y dotándolo de mejores herramientas”, continuó diciendo Rosario Romero, la que finalmente ponderó el trabajo de los empleados del Consejo de la Magistratura.
Récord de concursos
En la ocasión, y por los consejeros salientes, hizo uso de la palabra Gisela Schumacher, quien representó a la Asociación de Magistrados. Allí destacó que el Consejo de la Magistratura de Entre Ríos “con su estructura pequeña y su presupuesto acotado, es uno de los mejores del país” y bregó por trabajar para seguir perfeccionándolo.
Luego mencionó que en el período 2016-2018, “batimos un récord de concursos celebrados, puesto que fueron 46 en total para cubrir 82 cargos” y destacó que trabajaron “con libertad” y que se respetaron las propuestas elevadas por el Consejo de la Magistratura al gobernador.
“Dejamos un trabajo hecho con absoluta responsabilidad”, continuó diciendo la consejera saliente y sugirió a los nuevos integrantes que “trabajen con la máxima buena fe” y que confíen en el sistema, “puesto que la mejor garantía para tener unos buenos funcionarios, funcionarias, jueces y juezas, es la diversidad que los consejeros representan”.
Schumacher afirmó finalmente que “los jueces y las juezas, los funcionarios y funcionarias que pasan a integrar el servicio de justicia no sólo deben ser los más idóneos técnicamente, sino que también deben tener pasión, coraje, valentía, honestidad y además basar su vida y comportamiento en el respeto por los derechos humanos”.